Cómo empezar a escribir sin miedo (aunque no seas escritor)
Te has preguntado ¿Cómo empezar a escribir? ¿Cómo perder el miedo a escribir? O te has dicho: quiero escribir, pero no sé cómo... Perder el miedo a escribir, escribir sin ser escritor, comenzar a escribir o sufrir del bloqueo del escritor, es parte de la expresión personal de muchas personas. Ahora vamos a abordar estos puntos... ¡Comencemos!
Cómo empezar a escribir sin miedo (aunque no te consideres escritor)
Muchas personas quieren escribir, pero no lo hacen. No por falta de ideas, sino por miedo. Miedo a que no salga perfecto, a que nadie lo lea, o peor… a que sí lo lean y lo critiquen. Si ese es tu caso, este artículo es para vos.
Nadie nace escritor
Escribir no es un talento divino. Es una práctica, una disciplina y un acto de coraje. Porque cuando escribís, te mostrás. Y eso da miedo. Pero también da poder.
“Escribo para saber lo que pienso”, decía Joan Didion.
Y en eso, escribir se vuelve una forma de conocerte.
¿Por qué da tanto miedo escribir?
- Porque pensamos que debe salir perfecto desde el principio
- Porque nos comparamos con autores ya consagrados
- Porque creemos que “escribir” es solo para escritores
- Porque confundimos escribir bien con no equivocarse
Cómo empezar a escribir (aunque te tiemble la mano)
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Permitite escribir mal al principio
Nadie empieza con su mejor texto. Escribí como si nadie fuera a leerlo. -
Elegí un formato cómodo
Diario personal, notas en el teléfono, blog… Lo importante es empezar. -
Escribí lo que no podés callar
Las mejores ideas vienen de lo que más necesitás decir, no de lo que creés que “deberías” escribir. -
Ponete metas pequeñas
5 minutos por día. Un párrafo por noche. Un post a la semana. -
No edites mientras escribís
Dejate fluir. Ya tendrás tiempo para corregir después.
Escribir es un acto de libertad
Cuando escribís, tomás control de tu voz, de tu historia, de tus emociones. No necesitás aplausos. No necesitás permiso. Solo necesitás empezar.
Y si ya estás escribiendo en tu mente, te tengo una noticia: ya empezaste.
¿Qué te impide escribir hoy?
Dejalo en los comentarios o, mejor aún… convertilo en tu primer texto.

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